"Cuba no existe ya para mí más que en el recuerdo o los sueños, y las pesadillas. La otra Cuba, aun la del futuro, cualquiera que este sea, es un sueño que salió mal". Guillermo Cabrera Infante. Mea Cuba.

15.12.10

Tania Bruguera: cuerpo, arte y política (una entrevista)

Tania Bruguera: cuerpo, arte y política 
(entrevistas, conversaciones y videos)

Por su conexión a dos temas que me son paradójicamente cercanos -Cuba y el arte contemporáneo- incorporo algunas interesantes entrevistas a Tania Bruguera, a propósito de la presentación de su catálogo "La promesa de la  política" y de su más reciente anuncio de que fundará un "partido político  inmigrante". 
En ellas se evidencia -al menos parcialmente- el devenir de las acciones y perspectivas de Tania en estos años: desde sus iniciales acercamientos-hibridaciones con la trayectoria performativa-vital de Ana Mendieta, pasando por el concepto y gestión del proyecto pedagógico "Cátedra Arte de Conducta" en los últimos años, hasta sus más recientes -y polémicas- acciones: de  la última Bienal de La Habana, o su juego de "ruleta china", a la polémica repartición de "coca" en una conferencia en Colombia, o estas recientes intencionalidades directamente "políticas",  dentro de un sistema del arte de cada vez más difusos y precarios límites...

 Tania Bruguera: la promesa de la política (pulse)
(entrevista, en Contraindicaciones)

(La foto que encabeza la entrevista en plena Habana Vieja, o Centro Habana,
de lo más potente, por cierto)

P.D:  Dejo también el link de una excelente entrevista-conversación, "Cuba, Máquinas para volar y Caballos de Troya",  de Tania Bruguera con la curadora  y ensayista Tamara Díaz Bringas, aparecida en primer número en castellano de la importante revista Third Text - Tercer Texto (pulse)

Otras informaciones, entrevistas o performances  de Tania Bruguera



En Esfera Pública: acción en Colombia (pulse)

6.12.10

Sobreviviendo a Picasso: de autoría, originalidad y mercado...



Cine (o Sardina):  breves notas audiovisuales 
Sobreviviendo a Picasso: de autoría, originalidad y mercado…

La más reciente noticia del hallazgo –o aparición súbita- de 271 piezas de la autoría de Picasso, en manos de un  modesto y ya anciano electricista que lo conoció, Pierre Le Guennec, me ha hecho recordar una trilogía de filmes sobre este inefable artista, antítesis de la otra figura tutelar de las vanguardias en el devenir del arte del siglo XX: Marcel Duchamp.  

En el primero de estos filmes, El misterio Picasso, un excéntrico documental realizado por Henry George Clouzot, ganador de un premio especial en Cannes en 1956, su realizador apela a recursos estéticos y narrativos cercanos a lo pictórico, para recrear la realización de varias obras –unas 20- por el artista malagueño. Estas piezas, por cierto,  al final del documental fueron destruidas, como una evidencia del carácter fetichizado que tenía cualquier trazo hecho por este mítico artista del siglo XX. Otro de esos filmes, Sobreviviendo a Picasso, explora de una manera caústica y nada complaciente, esa otra faceta íntima –igualmente contradictoria- de Picasso, conocido por sus destructivas relaciones con múltiples mujeres. 

 

Pero el recuerdo más cercano a esta extraña aparición de obras de Picasso, es F de Fraude, el inclasificable filme-collage-falso documental del incorregible Orson Welles, que realizó en las postrimerías de su vida cinematográfica. En F for Fake,  Welles hace una trampa -una más- cuando en los últimos 15 minutos del filme recrea un supuesto romance de Picasso con Oja Kodar, la atractiva y joven compañera del mismo cineasta en sus últimos  años. En esa historia de pasión veraniego, supuestamente Picasso hace una veintena de cuadros sensuales como resultado del affaire con Oja, pero ésta pone como condición que las pinturas sean suyas, para luego exhibirlas sin el permiso del autor en una galería de París, con la consiguiente  reacción colérica del pintor, a pesar de que aparentemente recibió elogios de la crítica de la época por la frescura y el "renacimiento" de su pintura.

Y aquí es donde aparece la conexión con el  hallazgo actual, pues supuestamente Picasso también regaló estos dibujos al modesto electricista, aunque está vez la justificación de la "seducción" no parece cercana,  lo cual inclinaría a pensar en un acto de amistad, o de altruismo, algo no tan cercano -tampoco- a la personalidad del artista. Esto introduce otro inquietante vínculo con la  reciente aparición de esas piezas, como se evidencia en un revelador artículo-entrevista aparecido en El País, de  Antonio Jiménez Barca, donde el electricista afirma que no le dio mayor importancia a ese regalo, pues “Para mí no eran cuadros, no eran pinturas, muchos no estaban acabados, eran dibujos, pruebas, a los que no di mucho valor...". Aunque tal vez una de las afirmaciones más llamativas -y alucinantes- de la entrevista, es la espontaneidad y la capacidad de inventiva de este particular personaje, cuando afirma que fue capaz de ponerle títulos a las obras  del pintor: "Mientras las fotografiábamos les íbamos poniendo el título que nos parecía mejor, un poco al tuntún: a una la llamamos Bailarina, a otra Cabeza de mujer..., yo no sé".


Este sorprendente descubrimiento de piezas aparentemente “auténticas”, ha provocado que los  herederos de Picasso y sus abogados hayan demandado a Guennec por supuesto ocultamiento, argumentando que no imaginan al pintor regalándole a su electricista "un grupo de dibujos o dándole collages surrealistas que no habría regalado ni a Braque”. A este argumento de los herederos y sus abogados, habría que  recordarles una referencia precisamente a Picasso en F de Fraude: la del famoso falsificador Elmyr de Hory, quien con su habilidad para falsificar dibujos del pintor cubista, ponía en entredicho si muchas piezas que hoy se encuentran en importantes museos y colecciones,  fueron realizadas por el mismo Picasso, pues como se dice en el filme, el  propio artista fue capaz de decir que él  también pintaba “falsos Picassos”, haciendo alusión a ese carácter de manufactura casi pre-walholiana en que  se convirtió su obra. 

 

 

Otra cuestión que enlaza este hallazgo picassiano a F de Fraude, y especialmente a la excéntrica personalidad del falsificador Elmyr de Hory, son las especulaciones de la prensa y de los propios abogados de la familia  acerca de la "falsa" inocencia o ingenuidad de Guennec  (al igual que pasa con Elmy de Hory en su famosa biografía y el filme de Welles), pues no creen la actitud de aparecer totalmente sorprendido y hasta abrumado por las controversias que ha desatado de este hallazgo y las connotaciones jurídicas que ha alcanzado, reactivando de alguna manera esa difusa relación entre verdad y falsedad, no solo respecto al arte, sino de los comportamientos humanos mismos.       

Ahora bien, quizás la clave de toda esta tormenta se encuentra en una frase de Orson Welles casi al final de F de Fraude, cuando frente a la Catedral de Notredame reivindica la idea de una creación "sin nombre": "qué importa quien habla", nos dice Welles, en una frase que pareciera un eco de Barthes, o de Godard,  en esa misma época (1973) que se hizo el filme;  una afirmación contundente que se sitúa en las antipodas de la fetichización mercantilizada de la autoría -de la cual Picasso es uno de sus paradigmas mayores- y la negación paralela de que un desconocido y modesto electricista como Guennec,  pueda tener el derecho a ese legado que le cambiaría la vida a él y sus descendientes, por unas reglas -las del mercado del arte- que él mismo ni siquiera conoce...  


2.12.10

Nuevo cine latinoamericano, fútbol y Memorias del desarrollo


Cine (o Sardina): breves notas audiovisuales 
Nuevo cine latinoamericano, fútbol y Memorias del desarrollo 

"Todo sigue igual, aquí todo sigue igual"
-Sergio, protagonista de Memorias del subdesarrollo"


En estos días se inaugura en La Habana, como cada diciembre desde 1979, el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, que ya de "nuevo" solo tiene el nombre o la retórica, porque con 32 años -casi la edad de Cristo antes de ser crucificado- no puede presumirse de ser un inocente imberbe, mucho menos con el agua que ha llovido desde aquellos revolucionarios Glauber Rocha o Titón Gutiérrez Alea allá por los 60´. Y menos aun si lo sigue encabezando un octogenario como Alfredo Guevara, hablando con poses de eterno adolescente, cuando se refiere a la supuesta "renovación" del socialismo cubano.

Y por cierto, tanto la figura del presidente vitalicio del ICAIC como el cartel del festival, tienen un extraño aire añejo, decimonónico, quizás por aquello del reciclaje o vintage, tan de moda hoy...


Pero lo que más me llamó la atención en estos días previos al evento, en contraste simbólico a los años 80´- 90´, donde parecía sentirse en La Habana una cierta liberación y apertura, con estudiantes y no estudiantes junto a turistas culturales y algunos "famosos" recorriendo las calles y cines de la ciudad -junto a las ansiadas bajadas de temperaturas y el cercano fin de año- es que esta vez la aglomeración frente al cine "Camilo Cienfuegos" en Villa Clara, con el letrero listo del FNCL, fue una juventud y adolescencia enardecida no porque no pudieron entrar a ver el último filme de un subversivo cineasta joven del continente, sino porque les dijeron que iban a proyectar el juego del Barcà contra el Real Madrid, les cobraron y al final los engañaron con quien sabe qué documental, seguramente menos emocionante que presenciar a Messi o Ronaldo...

Las protestas en fotos -lo más elocuente- fueron expuestas por  el sitio Café Fuerte, incluyendo una sala roja despoblada y algo desvencijada luego del zafarrancho de inconformidad.   


Lo otro que me llamó la atención cuando revisé el sitio del FNCL, es que el filme de Miguel Coyula Memorias del desarrollo, realizado casi en su totalidad por su director y ganador de varios premios internacionales, quedó relegado a la sección de "Latinoamérica en perspectiva", es decir, fuera de la competencia oficial. ¿Será que no se considera suficientemente latinoamericano el filme por no haber sido producido en Latinoamérica?. Si es así, tendrían que dejar fuera de concurso a casi todos los presentados, pues en su mayoría han sido financiados, en buena parte, desde Europa y EE.UU.Y, aun cuando no he tenido la oportunidad de verlo -ni conozco los entresijos internos del festival- solo (mal)recuerdo las censuras o semicensuras, omisiones y ocultamientos que han sufrido anteriomente otros filmes incómodos en este evento: desde la polémica Alicia en el pueblo de las maravillas a inicios de los 90´, al documental de Florian Borchmeyer y Antonio José Ponte, El nuevo arte de hacer ruinaspor no mencionar otras censuradas a lo largo de estos últimos años.

En todo caso, como forma de visibilización, enlazo acá una entrevista a Miguel Coyula aparecida en el blog La pupila insomne de Juan Antonio García Borrero, así como dos referencias bien excéntricas -como es habitual en ellos- de Néstor Díaz de Villegas y Orlando Luis Pardo, aparecidas en Diario de Cuba,  así como una  entrevista a Edmundo Desnoes a propósito de la novela y el filme, donde tuvo la oportunidad de participar como co-guionista, como en la primera Memorias...

Quizás con este ninguneo o semiocultamiento de Memorias del desarrollo, al dejarla fuera de la sesión oficial del festival, los organizadores retoman aquella célebre frase de Elena a Sergio, cuando le preguntó si era "revolucionario o contrarrevolucionario", para responderle ella misma, con total naturalidad y cierto cinismo: "tu no eres nada.."; metáfora espontánea e inigualable, que se acerca a la figura informe y aplastada del cartel de la Memorias...de 1967, o del personaje sin rostro en el cartel de esta Memorias...del 2009.  


P.D: Enlazo una entrevista que realizó Orlando Luis Pardo a Miguel Coyula  -La historia al estilo de un cómic (pulse), en Dario de Cuba- donde se evidencian algunas de las interioridades y motivaciones del filme, así como las "negociaciones" que implicó proyectarla en el reciente festival de La Habana, aun en esta semi-invisible sección paralela.Por lo demás, muy interesantes las perspectivas -al menos para mí, por la cercanía a sus opiniones- de Mario Coyula respecto al personaje de Sergio y su revalorización actual, más allá incluso de "Memorias..." y del mito Cuba...